Resumen Corto de 1984

Ficha del Libro

Resumen Breve

La novela comienza con Winston Smith regresando a su apartamento en la ciudad de Londres, en lo que antes era Inglaterra, ahora parte de la provincia de Oceanía. Winston trabaja en el Ministerio de la Verdad, donde su trabajo consiste en alterar documentos históricos para que se alineen con la propaganda del Partido. Aunque aparentemente es un miembro leal del Partido, en su interior, Winston siente un profundo odio hacia el Gran Hermano y el régimen que gobierna su vida. Se siente atrapado en un mundo donde cada movimiento es vigilado y cada pensamiento puede ser castigado.

El Partido impone una ideología conocida como Ingsoc (Socialismo Inglés), y controla la sociedad a través de varios ministerios: el Ministerio de la Verdad (que manipula la información), el Ministerio de la Paz (que se ocupa de la guerra), el Ministerio del Amor (que castiga y reeduca a los disidentes) y el Ministerio de la Abundancia (que controla la economía). La vigilancia constante es mantenida por la Policía del Pensamiento, que persigue cualquier acto de disidencia o incluso pensamientos en contra del Partido, conocidos como "paracrimen".

Winston comienza a cuestionar más abiertamente el régimen cuando compra un diario en una tienda de antigüedades en una zona de los "proles", la clase trabajadora de Oceanía. Allí comienza a escribir sus pensamientos privados en contra del Partido, un acto que, si fuera descubierto, lo llevaría a la muerte o a la reeducación. La simple acción de escribir en el diario es un acto de rebelión, pues en la sociedad de "1984", incluso pensar en contra del Partido es un crimen.

Winston se siente atraído por una compañera de trabajo, Julia, a quien inicialmente desconfía porque cree que podría ser una espía del Partido. Sin embargo, Julia le revela que comparte sus sentimientos de odio hacia el Partido y que ha estado llevando una doble vida, aparentando ser una ciudadana leal mientras en secreto infringe las reglas. Los dos inician una relación amorosa clandestina, lo que representa una forma de rebelión en una sociedad donde el amor verdadero y la sexualidad son suprimidos y controlados por el Estado.

Winston y Julia encuentran un refugio para sus encuentros en una habitación sobre la tienda de antigüedades donde Winston compró su diario. Este lugar se convierte en un santuario para ellos, libre de la constante vigilancia del Partido. A través de Julia, Winston experimenta un nuevo sentido de libertad y comienza a fantasear con la posibilidad de un levantamiento contra el Partido. Sin embargo, ambos saben que su relación está condenada y que eventualmente serán descubiertos.

Durante este tiempo, Winston se obsesiona con la idea de que existe una resistencia organizada contra el Partido, liderada por un hombre llamado Emmanuel Goldstein, el supuesto enemigo público número uno del Estado. Goldstein es presentado por el Partido como un traidor y el líder de una organización secreta conocida como la Hermandad. Sin embargo, Winston no sabe si la Hermandad realmente existe o si es solo una invención del Partido para atrapar a los disidentes.

Un día, Winston y Julia son contactados por O'Brien, un alto miembro del Partido Interior, quien les da a entender que es parte de la resistencia. O'Brien invita a Winston a su apartamento, donde le confiesa que también odia al Partido y les da un libro supuestamente escrito por Goldstein. El libro describe cómo el Partido mantiene su poder mediante la manipulación constante de la información, el control del pensamiento y la opresión brutal. Winston, entusiasmado, lee el libro en su santuario junto a Julia, convencido de que finalmente ha encontrado una explicación para la opresión que ha sufrido toda su vida.

Sin embargo, pronto se descubre que todo ha sido una trampa. Winston y Julia son arrestados en su refugio por la Policía del Pensamiento, y se revela que O'Brien nunca fue parte de la resistencia; en realidad, era un leal miembro del Partido que estaba vigilando a Winston todo el tiempo. La tienda de antigüedades y la habitación que Winston creía ser su refugio eran en realidad parte de la trampa para capturarlo.

Winston es llevado al Ministerio del Amor, donde es sometido a torturas físicas y psicológicas por O'Brien con el fin de "reeducarlo". Durante estas sesiones, Winston es obligado a confrontar su traición a Julia y su amor por ella, y se enfrenta a su mayor temor en la temida Habitación 101. O'Brien le muestra que el Partido no solo busca el poder sobre el cuerpo de las personas, sino sobre sus mentes y almas. La tortura culmina cuando Winston, bajo una inmensa presión psicológica, traiciona finalmente a Julia, rogando que le hagan daño a ella en lugar de a él.

Finalmente, Winston es liberado, pero ha sido completamente destruido psicológicamente. Ya no es capaz de odiar al Partido ni al Gran Hermano; en su lugar, ha sido condicionado para amarlos. La última escena de la novela muestra a Winston en un bar, completamente derrotado, y finalmente cediendo su mente al control del Partido. Él acepta que ama al Gran Hermano, completando así su total sometimiento al régimen.